Una educación centrada en los valores, el juego, el amor, estímulos y emociones, es a lo que llamamos “educar con el corazón”. Esto significa que debemos enseñar a reconocer y gestionar adecuadamente las emociones de nuestros niños, lo que permite formar en un futuro personas autónomas, capaces de autogenerarse estados de motivación, bienestar, salud y paz.
Al educar con el corazón, generamos experiencias positivas, logrando el equilibrio del respeto, la amabilidad y el amor hacia nuestros niños/as, lo que nos permite conectar de forma asertiva y cautivadora con cada uno de ellos en esta etapa de su proceso educativo.
Es sabido que todos los niños aprenden a un ritmo diferente y que manifiestan variados intereses. Por ello, en nuestra Escuela de Lenguaje Rucalaf fomentamos la motivación y el apoyo para que nuestros niños/as logren un estímulo apropiado, utilizando un lenguaje con un trato cordial y afectuoso como herramienta para llevar a cabo cada una de sus experiencias educativas dentro del aula.
Contamos con las capacidades y preparación para acompañarlos a descubrir sus habilidades en actividades, para que alcancen a desarrollarlas de una manera creativa y lúdica. La relevancia de educar los sentimientos y las emociones en el aula es una parte fundamental de nuestro establecimiento y quehacer educativo.
“Educando y enseñando con y desde el corazón es la manera en la que dejaremos un recuerdo imborrable en la memoria de nuestros niños y niñas, marcando un camino inolvidable hacia su futuro”.
- Loreto Troncoso B.
- Técnico de nivel superior en educación diferencial.
- Escuela de lenguaje Rucalaf.
